¡Bienvenidos de nuevo a este vuestro blog, amantes de la buena cocina y de los videojuegos!
Bien es verdad que hace solo unos poquitos días hemos podido celebrar el día idóneo para los enamorados al que algunos tildan como un invento de las grandes superficies para seguir gastando y otros que lo consideran perfecto para crear memes tan icónicos como el de Samsagaz Gamyi y su lentitud para alcanzar los pasos de Frodo. El caso es que a nosotros también nos representa en su totalidad el ya reconocido meme porque mira que dijimos que ahora, al estar más parados que un avión de mármol, íbamos a traer más contenido al blog cosa que, por hache o por b, nos ha sido imposible al dar más importancia a otros quehaceres personales que a poder seguir trayendo nuevo contenido haciendo que vayamos lentines en lo que a nuevas publicaciones se refiere.

Aún así, hemos podido disfrutar de una buena hornada de videojuegos con los que poder empezar el año con buen pie. Además, hemos tomado nota de nuevas ideas que, aunque tarden en llegar, irán engrosando la lista de nuevos posts con los que deleitaros en forma de receta gracias a las experiencias que nos han brindado estos nuevos títulos (y algún que otro rejugado), sin olvidar nuestras habituales recomendaciones videojueguiles para que podáis disfrutarlas siempre que queráis.

Aunque bien hemos de decir que toda lo que se dice toda, no va a ser recomendación nuestra, pues es cierto que pudimos llegar a conocer algo más este videojuego después que nuestro amigo Manu, sí, el autor de ese gran proyecto que se llama La Memory Rosa (y que no hace falta que os digamos que lo sigáis sin falta ¡No? ) nos vendiese el título a las mil maravillas pudiendo hacernos con él en una de esas ofertas que aparecen a final de año en una reconocida tienda online. Y bueno, tanto nos ha gustado que además de poder realizar una receta con la que acompañar este post, también pudimos hablar un poquito de él en el apartado sonoro del proyecto que hemos mencionado hace escasas líneas. No hace falta que os recordemos qué debéis hacer, aunque eso sí, disculpad la voz de nuestro enviado al programa. Os dejamos aquí el enlace para que podáis escucharlo mientras leéis esto o, mejor aún, mientras os animáis a preparar la receta:

https://go.ivoox.com/rf/137806052

Además, podemos decir que finalmente nuestra PS5 ha podido estrenar un nuevo año sin tener que pasar por el sufrimiento de tener que soportar reproducir un título de dudosa calidad por lo que tiene que estar agradecida al buen hacer en su desarrollo del estudio Odd Meter y publicado por 11 bit studios. Y ojito pues si como decimos nuestra consola pasó penurias por tan poca cosa, este equipo de 16 personas que, debido a la fatídica contienda que desgraciadamente se sigue llevando a cabo en el este de Europa, decidió trasladar sus operaciones de Rusia a Kazajistán para continuar con el desarrollo del juego pudiendo finalmente lanzar su producto en el mes de mayo del año pasado para XBOX, PS5 y PC y recibiendo críticas positivas por su resultado.

Gracias a la ardua labor y el sacrificio que hicieron dentro de esta compañía vamos a poder disfrutar en cualquiera de nuestras máquinas de una historia que nos situará en una Rusia algo alternativa del siglo XIX.  En ella, nos pondremos en la piel de la protagonista, Indika, una joven monja que vive en un convento de clausura donde más allá de poder vivir una vida tranquila presentará una conexión especial y oscura ya que puede hablar con el diablo. A partir de aquí y una vez iniciada la historia, el juego explorará el viaje de esta joven novicia mientras abandona la seguridad del convento para enfrentar un mundo caótico y lleno de contradicciones.

Uno de los puntos más fuertes del juego es su narrativa, que nos permitirá tomar decisiones e interactuar con múltiples personajes a lo largo del camino. A través de estos encuentros, se explorarán distintos aspectos de la sociedad rusa de la época, como la pobreza, la religión, el auge del pensamiento crítico y la sombra de la opresión política. Todo ello se verá aderezado con una combinación de sátira, drama y momentos surrealistas, lo que nos dejará con más de una escena que nos hará quedarnos boquiabiertos ante la pantalla.

En cuanto a su jugabilidad, nos va a permitir «combinar´´ mecánicas que pasarán desde una exploración que puede pecar de bastante lineal, pues en ningún momento vamos a poder perdernos por realizar una acción o buscar algún objeto necesario a superar plataformas, completar algún que otro minijuego y resolver varios de los puzles que nos obstaculizarán el camino en más de una ocasión. Y es en este último aspecto donde el juego presenta una peculiar característica. Para resolver estos acertijos vamos a poder deformar la realidad al entrar en conflicto interior con lo que el demonio quiere que realicemos o pensemos, por lo que deberemos tirar de rezos a cascoporro para solucionar la papeleta. Esto conlleva que durante ese tira y afloja entre ave marias y blasfemias luciferescas, podremos observar por donde empezar a meter mano al puzle de turno, haciendo uso de esta distorsión representada con distintos colores, indicando cada acción y, a la par, observando el desarrollo de esta extraña relación. Una pena que esta mecánica solo se use durante los primeros compases del juego ya que después los acertijos derivarán por otros derroteros para su solución, pero no deja de ser cuanto menos, curiosa.

Más allá de tener que darle a la materia gris durante nuestro avance tendremos que subir y escalar por más de un sitio para llegar a nuestro destino, presentando de esta manera plataformas algo fáciles, pero teniendo especial cuidado al controlar al personaje pues sí que es verdad que el control en ciertas ocasiones está poco pulido y esto conllevará a que nos demos una buena hostia poco consagrada que nos lleve directitos al Game Over. Otra cosita en la que puede pecar la jugabilidad es en la resolución de pequeños quick time events que en más de una ocasión nos sacará de contexto al estar implementados en situaciones algo imprevistas.

También vamos a contar con una especie de contador de experiencia que irá subiendo o bajando conforme avancemos en la trama y realicemos algunas acciones que puedan tanto beneficiarnos como perjudicarnos. Esta también se podrá ver incrementada al recolectar ciertos objetos de índole religiosa que nos permitirán acrecentar unos puntos de fe que podremos utilizar para adquirir nuevas facetas/habilidades acordes a la devoción que pueda profesar la protagonista, que de una manera u otra pues nos van a servir para más bien poco, cosa de las que os daréis cuenta durante la travesía y de la que no diremos nada por no hacer spoilers así que…¡Ya estáis tardando en jugar y comprobarlo, pecadores!

Ah ¿Os acordáis que unos párrafos más arriba hemos dicho que nos encontraremos con escenas surrealistas? Pues parte de eso lo vamos a poder comprobar al intentar completar varias de sus fases en las que pasaremos de encontrarnos en un entorno 3D más que realista a vernos inmersos en pantallas con toques pixel art que representarán la transición del abandono de la dura realidad en la que se ve inmersa la protagonista.

Y es que de esta guisa se van a combinar de manera magistral estos dos estilos visuales radicalmente diferentes para transmitir emociones y profundizar en su narrativa. Por un lado, el realismo opresivo que va a capturar y representar la dureza del mundo terrenal, donde nos encontraremos con unas escenas que estarán representadas con detalles bastantes oscuros y opresivos y donde predominarán los tonos apagados. Esto dará como resultado captar esa atmósfera depresiva y angustiosa tan representativa de la Rusia del siglo XIX y resaltando sobremanera la sensación de desesperanza y lucha interna de la protagonista. Por otro lado, el pixel art bucólico y surrealista simboliza los momentos de reflexión y las conexiones con lo sobrenatural indagando en la memoria y los recuerdos felices y nostálgicos de la esta sufrida novicia además de servir como un descanso visual y emocional del tono más oscuro del juego.

Esta dualidad no solo será todo un deleite visual, sino que también será una herramienta fundamental para contar una historia que se siente única y profundamente personal.

A nivel visual, el juego también destaca por su cuidada ambientación, ofreciéndonos una gran variedad de escenarios. Desde el oscuro convento donde comienza la historia hasta una plaza de pueblo abandonada por la situación civil o un bosque nevado, cada entorno está repleto de pequeños detalles que enriquecen la narrativa y refuerzan la inmersión en la trama. Además, los objetos cotidianos, como herramientas, libros o íconos religiosos, no están ahí solo como decoración, sino que muchos de ellos tienen un propósito interactivo: podrán usarse para resolver puzles, obtener información o incluso servir como coleccionables.

En cuanto al diseño de los personajes, se nota el esmero puesto en su creación para complementar la atmósfera del juego. Los modelos humanos presentan un nivel de detalle bastante realista, con expresiones faciales y movimientos que reflejan a la perfección las dificultades que enfrentan y su relación con la historia. Por ejemplo, veremos campesinos con rostros marcados por el cansancio y cuerpos encorvados por años de trabajo, o soldados heridos en estado de shock tras una dura batalla.

Este mismo nivel de detalle se aplica a las entidades sobrenaturales que la protagonista encontrará en su viaje. A diferencia de los personajes humanos, estas figuras destacan por su estética estilizada y abstracta, con formas y colores que rompen por completo con el resto del mundo. Esto no solo refuerza su naturaleza no humana, sino que también potencia el impacto visual y la sensación de lo inquietante dentro del juego.

No podemos dejar de lado otro aspecto fundamental del juego: su apartado sonoro. La música juega un papel crucial en la creación de su atmósfera ya que aunque los detalles sobre los compositores no son abundantes, la banda sonora combina melodías melancólicas que representarán el peso emocional, melodías psicodélicas  y discordantes que acompañarán a la perfección a los momentos más oscuros y surrealistas del juego además del conflicto interno de Indika con el señor del mal y una instrumentación de época al utiliza instrumentos tradicionales para reforzar la ambientación rusa del siglo XIX.

En varias ocasiones el silencio tomará protagonismo, permitiéndonos escuchar únicamente el sonido del viento, las pisadas sobre la nieve o el murmullo de un río, lo que demuestra un gran cuidado en los efectos de sonido. Destacar también el doblaje y los diálogos de los personajes ya que, al igual que su representación visual, cada conversación nos permitirá conocer mejor su personalidad y sus circunstancias.

Y poco más podemos destacar de este juego que como bien hemos dicho nos ofrecerá una temática bastante profunda y multifacética que va a explorar las contradicciones de la fe y la lucha entre la doctrina religiosa y la espiritualidad personal, a la par de ofrecernos una reflexión sobre la opresión política y las desigualdades sociales de la época con un tono tragicómico y haciéndolo relevante incluso en el contexto actual por el tema que ya os explicamos al principio y en el que se ha visto inmerso el estudio.

A partir de aquí y como bien decimos siempre, queridos lectores, ya os toca a vosotros poder indagar algo más sobre el juego si os decidís a probarlo, cosa que os recomendamos encarecidamente hacer sin falta ya que sin ser un juego top o uno de esos títulos con los que poder pasar el rato sin más si que nos dará momentos para poder reflexionar, pensar y darle al coco con lo que hemos podido ver y experimentar en ciertas escenas.

Más allá de eso ahora solo nos queda dejar de discutir con el diablo para ponernos manos a la obra y preparar una nueva elaboración con la que poder acompañar este post y a la par, rendir homenaje a este gran juego. Para ello y viendo el devoto contenido que empapa a este título hemos decidido investigar sobre elaboraciones con un significado religiosos y hemos realizado nuestra versión de un pan dulce que por lares rusos recibe el nombre de Kulich. Esta es una elaboración que se prepara durante la Pascua ortodoxa y que tiene bastante parecido con el Panettone italiano con la particularidad que conlleva este dulce ya que se cree que este posee una serie de propiedades místicas.

Por esa razón se hornean varios durante estos días de celebración, siendo uno de ellos consumido por la familia, otros regalados y otros destinados para ser guardados tradicionalmente con los iconos religiosos, en honor a los familiares fallecidos.

Además, hornearlo es una de las tareas ceremoniales más importantes, ya que de ello dependerá el destino de la familia de la casa donde se elabore, ya que, si este sube de manera correcta significa que la familia estará bien, pero si la masa no sube en el horno o si la corteza comienza a agrietarse puede ocurrir un desastre.

La preparación de la masa es todo un ritual que debe realizarse en paz y tranquilidad puesto que se trata de un sacramento familiar del que, como creían los antepasados, dependía la vida de la familia, por lo que está totalmente prohibido preparar la masa con mucha prisa o de mal humor. Los rusos, muy supersticiosos ellos, creen que este un alimento capaz de absorber la energía de quién lo elabora y, por lo tanto, transmitirla por lo que es sumamente importante que la persona que lo haga tenga un excelente estado de ánimo para no transmitir a su familia irritación ni fatiga durante estos días sagrados.

Huelga destacar que poco os va a poder pasar si os sale regulinchi por vuestro estado de ánimo, pero lo mismo si seguís al pie de la letra la receta que os dejamos o hacéis un pacto con el demonio durante las no más de cinco horas que os ofrecerá el juego os saldrá de rechupete.

Nosotros os alentamos a os que decantéis por la primera opción que seguro no os dará tantos quebraderos de cabeza. Ah, además en esta versión vamos a sustituir las uvas pasas que lleva la receta original por perlas de chocolate, que utilizar ese tipo de frutas en un postre si que es cosa del demonio.

Sin más dilación, vamos a subir nuestro nivel de fe para elaborar recetas, nos vamos a enfundar nuestro bendecido delantal y vamos a elaborar este delicioso Kulich.

¡Esperemos que os guste! ¡Allé Vamos!

PRESSTARTCOOK

Kulich Indika

Ingredientes

-150 Grs Leche Entera

-520 Grs Harina Fuerza

-25 Grs Levadura Fresca Prensada

-25 Ml Vodka

-2 Huevos

-C/S Ralladura Limón

-2 Grs Sal

-100 Grs Azúcar

-5 Ml Esencia Vainilla

-125 Grs Mantequilla Sin Sal

-100 Grs Perlas Chocolate

Para el Glaseado

-125 Grs Azúcar Glas

-14 Grs Clara Huevo

-6 Ml Zumo Limón

Elaboración

Lo primero que haremos será elaborar el prefermento. Para ello, vamos a poner en un bol la levadura fresca, el azúcar, la leche tibia (importante que no esté muy caliente) y 150 grs del total de la cantidad de la harina, que vamos a tamizar con la ayuda de un colador antes de añadirla. Mezclamos bien todos los ingredientes, tapamos el bol con papel film y lo dejamos fermentar en un lugar templado durante unos minutos hasta que suba y esté burbujeante.

Cuando esté listo vamos a añadir el vodka, los huevos batidos, la ralladura de limón, el azúcar, la sal, la vainillina y el resto de la harina tamizada, salvo 20 grs que vamos a reservar para más adelante. Juntamos todo bien con la ayuda de una espátula y dejamos reposar otros diez minutos.

Ahora vamos amasar todo con la mano durante unos 10 minutos hasta obtener una masa algo seca. En este momento añadiremos a la masa la mantequilla previamente empomada para que se integre mejor y haciendo en varias tandas hasta que se mezcle totalmente, si esta se nos pega en las manos durante el amasado vamos a espolvorearla sobre la encimera para que deje de estarlo y podamos amasarla bien. Formamos una bola con la masa y la introducimos en un bol engrasado con mantequilla o aceite dejando reposar la masa para que leude durante 2 horas.

Trascurrido este tiempo vamos a volcar la masa en la encimera y con la ayuda de un rodillo vamos a estirarla. En este momento volcaremos las pepitas de chocolate por encima para repartirlas sobre la superficie de esta, momento en el vamos a doblarla sobre si misma para formar un cilindro.

Ahora vamos a dividir la masa en pequeñas porciones que colocaremos en el molde que tengamos a mano. Si queremos que quede como una elaboración original y que sea alto podemos utilizar latas limpias a las que forraremos con papel de hornear por dentro o bien podéis utilizar cualquier molde que tengáis por casa ya sean de silicona o de papel que el resultado será el mismo. Eso sí, es importante que la masa ocupe algo menos de la mitad del molde y dejamos el molde de nuevo en un lugar templado durante media hora para que la masa vuelva a subir.

Precalentamos el horno a 180ºC e introducimos el molde con la masa para hornear las piezas durante 35 minutos. Una vez elaboradas sacamos las piezas del horno y dejamos enfriar.

Mientras se enfrían vamos a elaborar el glaseado. Para ello vamos a mezclar bien en un bol y con la ayuda de una varilla el azúcar glas, la clara de huevo y el zumo de limón. Batimos bien para que se disuelva bien todo el azúcar hasta obtener una mezcla contundente.

Vertemos el glaseado encima de las piezas y decoramos con fideos de colores, de chocolate o bien con frutos secos picados. Eso ya lo que más os guste o tengáis por casa.

Y listo, solo queda sentarnos a la mesa, encender nuestra consola, bendecir nuestra partida a este gran juego que es Indika y no pelearnos con el demonio interior para ver quien se queda con el Kulich en la merienda.

Nosotros sin más nos despedimos hasta la siguiente entrada, queridos lectores.

¡Nos seguimos leyendo sin falta!
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