Bienvenidos de nuevo amigos!!! Sé que hay veces que me hago de rogar después de unos días desaparecido, pero no hay mal que por bien no venga y es que en estos días me encuentro de vacaciones y apetece desconectar por unos días para variar. El caso es que como al fin y al cabo no puedo estarme quieto y después de cargar bastante bien las pilas, me he puesto manos a la obra para realizar una serie de recetas muy dulces, eso sí esta vez con un poquito de ayuda ya que mi hermana ha accedido a ayudarme a realizarlas puesto que estos días los estoy pasando junto con mi familia, así que ya veis, de relax y con equipo de cocina con el que realizar estas fantásticas recetas.

Bueno, pero vamos a lo que os importa, la receta. Como ya hice anteriormente con otra receta, vuelvo a repetir homenaje a la saga Pokémon, pero esta vez centrándome directamente en el personaje más conocido y carismático de la saga…sí, me refiero a Pikachu, el Pokémon con más fama mundial y reconocido como el símbolo más representativo de la saga de videojuegos creada por GameFreak y lanzada al mercado de la mano de la gran N (ya sabéis, Nintendo), de la serie de televisión al ser el compañero de aventuras del protagonista de esta y de ser la cara principal de todo el merchandising lanzado bajo el nombre de la marca.

Como ya sabéis Pikachu es un pequeño ratón amarillo cuya característica principal es la de utilizar la electricidad como arma para combatir debido a que pertenece al tipo eléctrico dentro de las categorías por las que se clasifican las diferentes clases de Pokémon que podemos encontrar en todos los juegos. Es el Pokémon número 25 dentro de la Pokédex y tiene tanto evolución llamada Raichu como pre-evolución denominada Pichu.

Decir que fue el primer Pokémon en recibir un videojuego en el que era el Pokémon inicial obligatorio que se nos ofrecia al comenzar el juego debido a su éxito en la serie de televisión y que nos acompañaría a nuestro lado durante toda la historia. Fué lanzado para Game Boy justo unos años después del lanzamiento de los cartuchos originales Azul y Rojo (Verde Y Rojo en tierras niponas), recibiendo el nombre de Pokémon Amarillo.

Para ello he querido utilizar una receta muy básica como es la de las cookies, ya que representa los colores de este Pokémon (más o menos y utilizando colorantes) y dándole un toque de chispas que las englobe dentro del tipo eléctrico como a nuestro amigo Pikachu.

Para no andar con muchos rollos, si queréis conocer algo sobre esta saga mirad la receta anterior relacionado con Pokémon si sois nuevos en el blog, si ya nos conocemos vamos a pasar directamente a la receta. (Me gusta como ha quedado esto pues parece un libro de esos de elige tu propia aventura xD).

Así que sin más, vamos a lío y comencemos nuestra nueva y dulce aventura dentro del mundo Pokémon!!

PRESSTARTCOOK

Ingredientes

-150 Grs Mantequilla

-325 Grs Harina

-200 Grs Azúcar

-225 Grs Pepitas Chocolate

-1 Huevo

-1 Sobre Levadura

-Nata Líquida

-Extracto Vainilla

-Peta Zetas

-Colorante Amarillo

Elaboración

Lo primero que vamos a hacer es mezclar la mantequilla junto con el azúcar hasta que obtengamos una masa blanquecina y homogénea. Es importante que la mantequilla esté a temperatura ambiente para que se mezcle bien por lo que vamos a trabajarla con las manos* (bien limpias siempre ¿eh?), o bien podemos darle un toque de calor en el microondas.

Una vez elaborada esta masa vamos a  añadir los demás ingredientes: el huevo batido, el extracto de vainilla (la cantidad que queráis dependiendo de que os guste más el sabor o no) y un chorrito de nata líquida.

En un recipiente aparte vamos a mezclar la harina previamente tamizada junto con el sobre de levadura y a continuación vamos a añadir este conjunto a la mezcla anterior, sin dejar de  batir al ir añadiéndolo.

Añadimos ahora el colorante amarillo, las pepitas y mezclamos y una vez integradas en la masa añadimos los peta- zetas.**

Ahora formamos las galletas con unos 0,3-0,5 milímetros de grosor y las vamos colocando en una placa de horno con un papel vegetal que la cubra para que las galletas no se nos peguen al hornearlas.

Las horneamos a 180ºC durante unos 18-20 minutos.

Sacamos y dejamos enfriar para que endurezcan y listas para servir.

Espero que os gusten y que disfrutéis elaborándolas ya que es una receta muy sencilla en la que los más peques de la casa pueden ayudaros a elaborarla.

Un saludo y hasta otra.

INSERT COIN

*A este proceso para ablandar la mantequilla se le denomina Empomar.

** Las galletas no van a quedar muy amarillas por fuera debido al horneado, pero por dentro si que van a tener un toque más amarillento, también va a depender de la cantidad de colorante que utilicemos.